El perdedor: el espectáculo

Que gran problema existe en el fútbol, un problema que no es nuevo, un problema que se arrastra desde antes de que el mítico Pelé comenzara a darle patadas a un balón, el problema que hoy en día siguen sufriendo miles de aficionados que ven como el espectáculo es el único dañado, bueno, el espectáculo y sus equipos de fútbol.

Hablo del problema de los árbritros, dificil tarea la que llevan, dificil, pero comprometida. No se puede tolerar que ciertos elementos con silbato llamados árbitros se permitan el lujo de pitar encuentros de la máxima categoría. Y esto no es un calentón, es un grave problema, un problema que hace que la competición se vea en ocasiones desvirtuada.

Todos recordamos goles con la mano que se dan por válidos (recordemos aquel de Agüero, o la mítica "mano de Dios"), esos penalties fuera del área que se han pitado (sin ir más lejos esta jornada última en el que se le pitó un penalty a favor del Real Club Deportivo Racing de Santander, que acabó con la expulsión del central bético Juanito, cuando la falta se cometió claramente fuera del área), esos goles fantasma que no llegan a entrar, esas expulsiones absurdas, esos más que dudosos fueras de juego que en ocasiones se pitan, etc...

Los ejemplos son numerosos, pero en todos hay un denominador común, el árbitro, ese señor que en ocasiones comete errores garrafales, y con eso de el árbitro no me refiero solo al primer colegiado, me refiero a todo el cuarteto arbitral, desde el colegiado principal, hasta el cuarto árbitro pasando por los dos auxiliares de banda que también tienen su cosa, o si no, ¿quien no recuerda aquello de..." no me jodas Rafa, penalty y expulsión a quién"?.

Y sí, somos personas y todos nos equivocamos, es más en cierto modo eso es lo que hace tan especial al fútbol, el importante factor humano que tiene, pero cuando un mismo colegiado comete tantos errores (citemos por ejemplo el caso del colegiado Pino Zamorano) hay que hacer algo, ya sea inabilitar a ese colegiado o descenderlo de categoría, ambas técnicas usadas por la RFEF, pero de una forma muy pero que muy dudosa, claro está que el problema arranca desde la cúspide de la misma RFEF, con su presidente, Angel María Villar, involucrado en diversos escándalos como el que sufrió el Real Betis Balompié la temporada pasada con supuestas llamadas entre el presidente de la Real Federación Española de Futbol, Angel María Villar y el máximo accionista del club heliopolitano, Manuel Ruíz de Lopera, en las que supuestamentamente el señor Villar amenazó al Real Betis con un trato desfavorable si no retiraba su apoyo a Javier Tebas, por otra parte reconocido enemigo del señor Villar.

Pero el único perjudicado en todo esto, el verdadero perdedor es el espetáculo, el aficionado que humildemente se paga su entrada o abono para ir a ver a su equipo y se va del estadio con la sensación de que le han "robado". Este es el grave problema, hasta que punto se desvirtúa la competición, hasta que punto son los árbitros culpables...

Hay que comprender que cada uno interpreta las cosas de una forma diferente, quizás sea ese el problema, ¿hasta donde se le puede dejar a un colegiado interpretar los hechos?, es muy dificil que una persona ajena al deportista pueda conocer la intención del mismo, pero por otra parte es indispensable el factor interpretación en el fútbol.

Sea cual sea el responsable, lo único que tenemos claro es que el que pierde es el fútbol y debemos cambiar esto, quizás implantando tecnología en el futbol, con cámaras para ayudar a los colegiados... no lo sé, pero algo debemos hacer.